domingo, 22 de marzo de 2020

Objetivo: Limpieza



La semana pasada completamos el segundo libro de la Torá, también conocido como Los cinco libros de Moisés, Éxodo. 

Esta semana comenzamos el tercer libro que se conoce en inglés como Levítico. El nombre hebreo para el libro es el mismo que el nombre de la porción de esta semana (parashá), Vayikra

El primer libro, Génesis, está conectado con el nivel Sifirot de Keter, el nivel semilla. Éxodo, el segundo libro está conectado a Jojmá. Vayikra está conectado con el nivel de Binah, el nivel que contiene nuestro depósito de energía.

La palabra hebrea Vayikra significa literalmente: "Y llamó". 

La porción comienza: "Y Hashem llamó a Moisés". Después de que Hashem llamó a Moisés, le habló. ¿Qué le dijo Hashem a Moisés? Le contó a Moisés todos los diversos sacrificios y los procedimientos para realizarlos adecuadamente. En el mundo de hoy ya no realizamos sacrificios físicos. Hoy usamos palabras. Entonces, ¿qué significa esto para nosotros hoy? Esta porción es realmente sobre sacrificios internos y la limpieza que se requiere.

Esta porción de la Torá siempre se lee al comienzo del primer mes del año astrológico, el mes de Aries que corresponde al primer mes del calendario hebreo, Nissan.

Este es el mes que contiene la fiesta de Pesaj, también conocida como la Pascua. 

Cada día de los primeros 12 días de Nissan hay un estudio especial para prepararnos para recibir Pesaj. El propósito de este estudio, es la limpieza, es el verdadero significado de esta porción. 

Cada uno de los primeros 12 días del mes corresponde a los 12 signos del zodiaco. Al enfocar y meditar primero, luego usar los aspectos positivos de cada signo y evitar las reacciones negativas asociadas con el signo, ganamos control sobre el signo a nivel de semilla. 

Estamos limpiando los aspectos negativos y reforzando los aspectos positivos de esa parte del signo que es parte de nosotros. 

Nuestro signo solar individual no importa en este caso. Todos tenemos partes de cada signo del zodiaco dentro de nosotros. De este modo, podemos obtener el control sobre nuestro mundo físico en lugar de ser controlados por la fisicalidad.

Esta es una energía cósmica disponible para todas las personas y no solo para una nación o religión.

Quiero compartirles las secciones que nos compartió Benjamín Malul, quien impartió esta clase en el año 2007: 

Estudiar El Zohar, la herramienta que tenemos para conectarnos a esta energía, las secciones 18, 51, 338 y 71 a 73 de la porción Vayikra.

Como veremos, seguimos sintonizados y en el ritmo del estudio toral de la Kabbalah. En esta ocasión el sacrificio de los aspectos reactivos y de la limpieza y pureza no solo física (también) pero sobre todo la espiritual.

Sigamos trabando juntos Comunidad

Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta
Basado en clase de Benjamín Malul - Vayikra



sábado, 21 de marzo de 2020

"El Poder del Buen Ojo"



LA PORCIÓN DE PEKUDEI: El poder del "buen ojo"

"En la porción de esta semana, la Torá relata el proceso de construcción del Tabernáculo. La Torá cuenta y resume cuidadosamente todas las medidas exactas de los materiales utilizados y de todas las piezas construidas.

Esto plantea una pregunta interesante. Tanto el Talmud [Ta’anit 8b] como el Zohar afirman que "las bendiciones no descansan sobre las cosas que se cuentan y se miden". 

Paradójicamente aquí, en la construcción del Tabernáculo, la Torá hace todo lo posible para contar y medir todo. ¿Cómo podemos conciliar estas dos cosas?

El rabino Levi Itzjak de Berdichov [en su libro Kedushat Levi] responde a este enigma explicando que hay dos tipos de "mirar". Un tipo es como el del malvado profeta Bilam, de quien dice, "dondequiera que mirara, una maldición vendría sobre él" [Zohar Chadash 68a]. Bilam tenía el "mal de ojo" por excelencia. El rabino Levi Itzjak explica cómo y por qué este mal de ojo se manifestó: “Cada vez que esta persona malvada miraba algo, lo separaba y lo separaba de la fuente suprema de la fuente de la vida. Él deseaba, y por lo tanto se centró en el objeto físico. El objeto era importante para él, pero no miró el poder de Hashem, Bendito Sea Él, que está dentro del objeto ".

Esta es realmente una lección increíble. Los kabbalistas enseñan que todo en este mundo está imbuido de la Luz del Creador. De hecho, es la Luz del Creador la que sostiene todo en este mundo. También es la Luz del Creador que le da a todo, sus características positivas. Es la Luz del Creador que lleva dentro, lo que hace que la comida sea sabrosa, las flores hermosas y que huelan agradablemente, y esto es cierto para todo en este mundo. Cuando disfrutamos algo, en realidad estamos disfrutando de las chispas de la Luz del Creador que están dentro de él.

Aquí el rabino Levi Itzjak nos enseña que tenemos la capacidad de influir realmente en la conexión de todo con el Creador. Cuando miramos algo y solo lo deseamos, y no pensamos en la Luz del Creador que está dentro de él, lo separamos de la Luz del Creador. Este proceso de pensamiento tan común, "desconecta" al objeto, de la Luz del Creador.

Este es el verdadero significado detrás de "mal de ojo". La comprensión aterradora es que no tienes que ser una persona "malvada" para provocar el "mal de ojo".

Desafortunadamente, todos hacemos esto, aunque inconscientemente, y a menudo, sin darnos cuenta de las consecuencias. Cuando "quitas" la Luz, lo que queda es oscuridad.

Por el contrario, también hay un aspecto positivo de ver y contar. Cuando una persona mira algo, pero piensa y se enfoca no en el objeto en sí, sino en la Luz del Creador que está dentro del objeto, fortalece su conexión con el Creador, con la fuente de todas las bendiciones y sus ojos se vuelven pozas de bendiciones"

En estos días en que nuestra mirada tiende a irse a ver todo lo malo, posa tus ojos en la belleza que si existe en abundancia en este mundo. En el sabor de lo que comes y como te alimenta y te sustenta, en la alegría de reír o poder conversar con alguien más. Muchas fuentes aún de bendiciones existen cada día.

Cuídate y cuida a otros y no olvides que este Mundo aún es un paraíso de Belleza.

Shabbat Shalom

Prana Raquel Pascual
Texto en itálica, Michael Berg acerca de la porción de Pekudei
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