JUEVES, 2 DE DICIEMBRE DE 2010
Los estudios de la Kabbalah nos ayudan a transformar nuestros patrones internos y a superar la programación de nuestro ego, pero a veces abatimos las cosas buenas que nos ocurren al llamarlas “coincidencias”. ¿Por qué? Porque si las llamáramos “milagros”, tal vez tendríamos que hacer más, tendríamos que estar más involucrados en nuestros estudios; así que nos limitamos. La verdad es que estamos ilimitados. Tenemos todas las herramientas que necesitamos para realizar nuestros propios milagros.
Yehuda Berg
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Disculpen la tardanza, ahora la que tiene problemas de conexión de internet en su casa soy yo.
Escribiré algo rápido porque ya no es el horario debido.
Los kabbalistas nos enseñan, que sólo hay una manera de bajar Luz y es a través de crear "la vasija correcta" sin esta, la Luz, no se puede manifestar, así que en Januká, queremos saber que tipo de luz está disponible, si no nos será imposible accesar a ella.
Januká está muy representada por el candelabro o Janukilla, misma que debe ser de aceite de oliva. No todas las flamitas se encienden en el mismo día. el primer día se enciende una la primer noche, la siguiente noche esa y una más, la tercera noche las dos primeras y una adicional, y así durante toda la semana con lo cual en total se llegan a encender treinta y seis flamas, mismas que tienen la numerología que se convierte en las letras Lamed Vav, que a su vez, al pronunciarlas juntas, nos dan la palabra "Lev" que quiere decir "corazón". Los kabbalistas nos dicen que esto no es coincidencia, sino que nos dice el tipo de Luz que podemos revelar en estos días. Una vez que lo sabemos, podemos preparar nuestra vasija.
Se dice entonces que para que nos pasen milagros que son cosas extraordinarias, nosotros debemos salirnos de nuestro ser ordinario, es decir, de nuestro modus operandi de "Deseo de Recibir para sí mismo "y desconectarnos entonces de la naturaleza egoísta.
Actos de compartir, actos de refrenar nuestra naturaleza reactiva. pero desde el corazón.
Eso es lo que requerimos para recibir el regalo de Januká. Una fista de la Luz de tu corazón.
Feliz semana de Januká.
Prana Pascual
Imagen: Un alumno de un centro de Kabbalah, diseñó este corazón que tiene un Nombre de Di-os. No es Lamed Vav en letras, pero la imagen me pareció muy ad hoc =)
Fuente de conocimiento: Days of Connection, Michael Berg Kabbalah Publishing
