Así como es importante creer en Dios, es igualmente importante creer en ti mismo.
Hoy, sé dueño de tu grandeza.
Yehuda Berg
________________________
"Obras son amores, no buenos deseos"
Nunca había entendido tan bien esa frase hasta que he estado comprendiendo que las personas no siempre captamos que nuestras palabras son las monedas de intercambio y que no honrarlas es devaluarlas, y que en caso de que no haya corrección de rumbo, eventualmente no servirán para comprar ni un gramo de confianza. pero que por el contrario, llenas de verdad, abren los Cielos.
¿Has dicho "Te quiero" sin querer de verdad? Yo quizás si, alguna vez lo hice, pero desde hace un buen tiempo procuro no hacerlo; prefiero pasar por fria de corazón en alguna ocasión, pero estar segura de que cuando lo digo, se sabe que es cierto y que tiene peso para llenar una vida.
Eso si, el "Te amo" --desde muy jovencita-- lo guardaba en la caja fuerte del corazón hasta que valiera de verdad los centenarios del alma decirlas. Lo he dicho poquito, pero cuando lo he dicho ha sido verdad.
Pensando en el tema de "la devaluación", cuando era niña no sabía cual era el problema de que "no hubiera dinero" en los países, pensaba que simplemente había que imprimir más billetes y se acabaría el problema ja ja ¡Qué ingenua! Cambió mi entendimiento cuando me dijeron que cada billete tenía que estar apoyado por lingotes de oro verdadero, y que si no lo había entonces tampoco podía haber más dinero, que el billete era sólo la emisión de un símbolo viable de portar, listo para el intercambio de bienes, sin necesidad de ser fisicoculturista u hombre fuerte del circo para poder transportarlo =)
Pues pasa igual con el "Te quiero". Si esas palabras no están soportadas por verdaderas acciones, por decisiones reales...no puede haber trato. No es que no haya quizás la buena intención, pero lo que no se manifiesta en acción, no logra asirse y duele.
Estamos en el mundo de la manifestación y aún después de la acción más espiritual como es rezar, hay que hacer kiddush (bendición del vino) y hamotzi (bendición del pan) para llevar la energía de la bendición al plano material. Amar sólo en la mente, aunque enaltece no procura.
Que el amor que des y el que recibas no sea palabra sin sustancia, que no sea como las hojas que se lleva algún otoño...Mereces ser amado de verdad.
Cree en tu valor.
Prana Pascual