Hace muchos años, escribí un cuentito que se llamaba "Tigre, el tripulantede la Luna". Es una historia muy pequeña pero que hablaba del sueño de un Tigre de poder viajar a nuestro satélite y ver nuestro planeta desde el cielo, conectando a personas que estaban en diferentes parte del mundo, llevandoles mensajes de sus seres amados cuando voltearan a ver el cielo nocturno.
Especialmente recuerdo que se refería a mensajes de amor a personas que por algún motivo no podían estar juntas físicamente.Creo que Tigre en esta ocasión ha ampliado sus servicios y ahora los mensajes son de un amor más amplio, amor a la sabiduría, amor a el trabajo de la conciencia, amor a la vida etc. =) aunque claro, siempre al amor por el amor.
Como saben mañana me voy de viaje a un curso que me tiene muy ilusionada que es Liderazgo y Kabbalah. Vamos a ver que gira en mi cabeza en estos días, ya les contaré, pero no me quise ir sin avisarles porque estos días no habrán afinaciones de mi parte, aunque si reciben directo las de Yehuda,tendrán su hermosa compañía.
Hoy quise despedirme con un cuentito que me encontré de un grillo que quería saltar hacia la Luna, no es un cuento kabbalista como tal, pero esun cuento de esfuerzo y sueños cumplidos
¡Nos vemos muy pronto! No me tardo. Con cariño, Prana
________________________________________El grillo que saltó a la Luna
Erase una vez cuando el mundo era joven, un grillo que soñaba con saltar hasta la Luna.
Nada deseaba tanto como mirar hacia abajo y ver la Tierra.
Noche tras noche, saltaba tan alto como podía, a veces llegaba a las ramas más bajas de un árbol, a veces incluso llegaba a las más altas, pero nunca llegó a acercarse a la Luna.
Los otros grillos que vivían en el valle se burlaban de su insensatez.-¿A la Luna?- decían riéndose. "Ridículo, imposible"
Sin desanimarse, el grillo seguía intentando llegar a la Luna. Con el tiempo, se le fueron debilitando las patas, de tantos aterrizajes durísimos como había hecho. Ya no podía saltar, ni cantar por las noches. Los demás grillos seguían mofándose de él, pero el continuó intentándolo, trepando lentamente a los árboles, hasta el día de su muerte.
Aún después de muerto siguieron riéndose de él. Las bromas fueron creciendo hasta convertirse en cuentos, cuentos que pasaron de una generación de grillos a otra y luego formaron parte de sus canciones.Y en el día de hoy se les sigue oyendo cantar sus aventuras.-
¡Mirad, -dicen los grillos padres a sus hijos- , en las manchas de la Luna se puede ver su cara mirándonos!
Así fue como, tras muchos años, el sueño del grillo se hizo realidad. Y colorín colorado este cuento se ha acabado =)