La porción de esta semana, Toldot, contiene la famosa historia de los dos hermanos gemelos Jacob y Esaú.
Aunque ellos tenían los mismos padres, la similitud que compartían terminaba allí. Jacob era puro, un tsadik (un alma justa), un canal de Luz y energía positiva. Por otra parte, su hermano Esaú era negativo, malvado, egoísta y amargado. Un canal de energía negativa.
Su abuelo, Avraham, acababa de morir y Jacob hizo un tazón de sopa
de lentejas para reconfortar a su padre, Isaac. Esaú entró , justo después de
regresar del campo, hambriento tras haber dedicado el día a cazar. Esaú olió la
sopa de lentejas y le dijo a Jacob que daría cualquier cosa por ella, así que
cambió su derecho de nacimiento, su primogenitura, por el placer momentáneo de
un tazón de sopa de lentejas.
Ya hemos trabajado el tema de cambiar ,o más por lo menos, mismo que vale la pena recordar siempre, pero en esta ocasión la reflexión la quiero llevar a el poder y la oportunidad de la transformación.
Jacob desde el vientre tenía la vena de ser espiritual y bondadoso, Esaú de ser malvado y egoísta, sin embargo eso parece una rifa de almas, algo que es un don que traes de origen.
Desde una perspectiva justa, nadie debiera de ser juzgado de antemano solo por el juego de cartas que le tocó, es difícil nombrar a un bebé como un tsadik sin saber cómo se desempeñará en realidad.
Todos tenemos recursos a nuestro alcance, pero es hasta que los ponemos en práctica que alguien realmente alcanza un grado meritorio de algún tipo. Nadie es por si mismo un sabio, aunque tenga toda la inteligencia para llegar a ello, si no estudia y pone en práctica sus características innatas.
¿Tu que haces diariamente para usar tus regalos espirituales?
¿Estás dejando "en semilla" (como la lenteja) tus talentos?
Considéralo
Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera - Psicoterapeuta Gestalt
Imagen https://elpais.com/elpais/2020/01/19/buenavida/1579463753_444681.html
https://kabbalah.com/es/articles/light-versus-lentil-soup/