La
porción de esta semana, Shemini, describe la muerte de los dos hijos de Aarón, Nadav
y Avihú.
Este
pasaje, guarda bastante parecido con otro previo que fue el momento en que los
hermanos de Yosef le vendieran como esclavo y dijeran a su padre Jacob que este
había muerto devorado causándole un dolor que vivió con él, los siguientes 22
años.
Los
hermanos de Yosef no se dieron cuenta de la gravedad de su acto y del
sufrimiento que causaron a su padre, hasta 22 años después que empezaron a
experimentar padecer grandemente por la hambruna que se manifestó en todo el
mundo, y por lo cual tuvieron que ir a pedir ayuda a Egipto.
Fue hasta
entonces que “les cayó el veinte”, de que sus malas acciones de años atrás,
ahora les estaban impactando.
En el
caso de Aarón, sucedió algo similar, Cuando vio la muerte de sus hijos, se
quedó en silencio.
Él sabía
que sus muertes habían ocurrido debido a la participación que él había tenido
en la creación del becerro de oro. Fue él quien había reunido el oro del pueblo
y lo había transformado en un becerro, y con esta acción el transfirió su luz
espiritual, su energía a esta abominable criatura para que pudiera cobrar vida.
Cuando
algo doloroso ocurre en nuestra vida, inmediatamente nos preguntamos ¿Por qué a
mí? ¿Qué hecho para merecer esto? ¿Por qué Di.os permite que esto me pase?
Las
personas justas como Aarón entienden la verdad, o puede que tome un
largo periodo de reflexión, como ocurrió en el caso de los hermanos de Yosef
que tardaron 22 años en darse cuenta, pero ellos finalmente se abrieron a la
verdad y fueron capaces de decir “cometimos un error con la ayuda de Di.os
podemos alcanzar otro nivel de consciencia en nuestra propia vida”.
Éste es el poder de nuestro ego el cual nubla nuestra percepción acerca de la verdadera causa del dolor en nuestra vida.
En este
caso cualquier forma de sufrimiento ya sea físico o emocional, es un mecanismo
para despertarnos ante la necesidad de examinar nuestra vida. Si
observamos atentamente, con honestidad y motivación sincera, podremos ver en qué
nos hemos equivocado y con voluntad y entendimiento, podremos corregir.
Y ahora, nuestro ejercicio del Omer
Día 4 del Omer Netzach de Chesed: resistencia en la bondad amorosa
Tranquiliza o conforta a un ser querido con la
constancia de tu amor.
Buen lunes Comunidad
Prana Raquel Pascual
Coachde Vida y Carrera | Psicoterapeuta Gestalt
Basado en lectura de la Biblia Kabbalista editada por El Centro de Kabbalah Internacional