Existe una conocida historia acerca de un hombre pobre de Jerusalén que soñó una noche con un baúl lleno de innumerables tesoros enterrado bajo un castillo ubicado en una tierra lejana. Se dijo: "Iré allá, lo tomaré y nunca más tendré que trabajar". Partió y el viaje le tomó cuatro meses. Cuando llegó, empezó a buscar el castillo.
Una mañana encontró el castillo y muchos policías alrededor así que no pudo entrar. Cuando cayó la noche trató nuevamente de entrar pero fue en vano. Un día el jefe de seguridad lo vió y le preguntó qué estaba haciendo. Él pensó: es mejor que le diga la verdad que mentirle . Le contó al jefe de la policía acerca de su sueño y éste se echó a reir. El jefe de la policía le dijo: "Si yo hubiese hecho caso de mi sueño, estaría en Jerusalén ahora mismo". ¿Por qué? "Anoche tuve un sueño loco acerca de un tipo en Jerusalén que tiene un cofre con un tesoro escondido abajo de su casa. ¿Crees que debo ir a Jerusalén hoy? ¡Estás loco. Vete de aquí!" Al pasar esto, el pobre hombre regresó a casa. Te puedes imaginar lo que encontró enterrado debajo de su casa.
La lección aquí es clara. Miramos hacia fuera para encontrar nuestra satisfacción, mientras que lo que necesitamos es mirar hacia dentro.
¿Qué cofre con un tesoro sin descubrir se encuentra escondido debajo de tu casa hoy?
Yehuda Berg
http://www.kabbalah.com/spanish/index.html
____________________________________________________
- Abuelita...¿Porqué tienes esos ojos tan grandes?? Para verte mejoooor
- Abuelita...¿Porqué tienes esas orejas tan grandes? Para oirte mejooooor
- Abuelita...¿Porqué tienes esos dientes tan grandes? Para comerte mejooooooooooooooooor.......¡¡¡ÑOM ÑOM!!!
...iba leyendo la historia de la Caperucita Roja y al ver la ilustración con un lobo enorme enfundado en un camisón que le quedaba diminuto y un gorrillo de dormir que apenas ajustaba, mi mente aún de niña decía..."¡¡Es evidente que es el Lobo!! ¿¿Cómo no lo puede distinguir de su abuelita??"
Pero como alguna vez alguien me dijo, lo que nosotros pensamos que es obvio, no necesariamente lo es.
¡¡Para mi lo notable de esta historia es lo abierto que estaba este hombre de Jerusalén a los mensajes y la voluntad férrea para seguirlos!!
Los tesoros en nuestra vida pueden ser incontables pero creo que lo que de verdad es la llave de poder acceder a ellos es tener la claridad de que estamos en un sistema que es mayor a lo que perciben nuestros sentidos, que podemos apreciar el mensaje y al mensajero puesto que todo lo que sucede --no importa la cara con que se presente-- es para bien y además, ser capaz de apreciarlos e ir por ellos incansablemente.
.............................................................................
Ayer mi amiga Edmée me dijo después de no vernos por algún tiempo "Se te ven más grandes los ojos...pero no es el maquillaje...es como si los ojos ahora te ocuparan más espacio en la cara..." (???)Entonces pensé: Ojalá sea "¡¡¡PARA VERTE MEJOR LUZ!!!" =0) ja ja ja
¡¡Sonríe!! =)
Prana Pascual