Sabemos que las primeras seis semanas de este libro las denomnan los kabbalistas: shovavim, un periodo de recuperar consciencia.
Le comparto algo muy interesante que escribe Michael Berg al respecto de esto y el proceso de las plagas que suceden en la Torah esta y la siguiente semana:
"Así pues, en una
conversación que sabemos que no fue física sino espiritual, los israelitas le
dijeron a Moshé: “Tenemos que ser sinceros con nosotros mismos sobre cuánto
daño le hemos hecho a nuestra alma por medio de acciones de negatividad y Deseo
de Recibir para Sí Mismo. Estamos en una situación en la que nuestra alma no
puede darnos esa fuerza de conciencia”.
Y, por lo tanto, no fue que lo
israelitas dijeron que no querían. Sí querían, pero sabían que no podían.
Está
escrito que su espíritu era corto, eso significa que su capacidad para mantener
su conciencia era débil debido a sus acciones de Deseo de Recibir para Sí
Mismo.
Moshé dijo: “Está bien,
entiendo. Aún no están en condiciones. No pueden tener esta conciencia.
Tomaremos el otro camino, el más largo, el camino distinto al de la conciencia
transformada y tendremos más oscuridad y dolor; tendremos las diez plagas”. Por
lo tanto, todo el propósito de las diez plagas y el resto de dolor, sufrimiento
y oscuridad que hubo en Egipto fue para darles a los israelitas la fuerza para
llegar a esa conciencia. Debido a que la Redención, y la eliminación de
oscuridad, dolor y sufrimiento, sólo pueden ocurrir de esa manera.
El propósito de cada una
de las diez plagas era eliminar algo de oscuridad de las almas de cada uno de
los israelitas y darles la capacidad de tener la conciencia de la que hablamos.
Y a través de las diez plagas y la oscuridad de Egipto, los israelitas lograron
tener dicha capacidad.
¿Qué ocurrió después de la décima plaga? Los israelitas
fueron purificados lo suficiente como para tener conciencia verdadera
constantemente y conexión con la Luz del Creador, y por eso los egipcios
tuvieron que liberarlos porque, una vez que alguien llega a ese estado de
conciencia, ninguna negatividad puede tocarlo. Así pues, el Faraón, los
egipcios y la negatividad no tuvieron opción, no pudieron tocar más a los
israelitas.
El proceso de las diez
plagas tuvo que ocurrir, y el propósito de la purificación de estas semanas en
las que estamos, llamadas Shovavim, es poder darnos la capacidad de tener
conciencia. El propósito de estas semanas es eliminar ese equipaje, no sólo
para ser puros, sino para ser capaces de llegar a un estado en el que podamos
tener verdadera conciencia."
Michael Berg
http://www.michaelberg.net/es/articles/entender-el-prop%C3%B3sito-de-las-diez-plagas