Saber esperar.

Esta semana estamos estudiando la porción llamada Schlaj Lecha que nos hará reflexionar acerca de tener "buena o mala consciencia".

Aquí me gustaría detenerme un poco y mencionar sobre "lo bueno" y "lo malo" antes de proseguir, porque estos dos son de los términos que más nos confunden en nuestra experiencia humana.

Generalmente nuestra comprensión está mucho más teñida de moral, es decir, de lo que es bueno o malo moralmente hablando, visto desde un nivel de "maldad" - "bondad" que nos sesga y nos lleva a juzgar.

Si podemos por un momento pensar más en términos de consecuencias como "resultantes", de causa-efecto, quizás nos liberemos un poco para comprender de manera más útil el concepto.

Actuar con "mala consciencia" desde el estudio de la Kabbalah es "actuar con agenda", con "deseo de recibir inmediato", el deseo del cuerpo, que sabe que se arrepentirá de comerse ese deliciosos pastel de crema cuando ha estado procurando mantenerse en linea...pero que lo hace porque ¡¡Que diablos, ya he hecho mucho esfuerzo!!

Esa consciencia la podemos identificar en muchos otros momentos: es la que nos hace tomar algo que no nos pertenece (tiempo, dinero, energía o incluso relaciones que no nos pertenecen), de violentar procesos, perder la paciencia, manipular las situaciones para que sean como queremos aunque las condiciones aún no estén listas. Podemos entonces comprender que son todas veces en que no respetamos el proceso de desarrollo natural, y por tanto traen consecuencias impensadas y probablemente insatisfactorias. El cuerpo quiere todo "ya ya ya" y será quien tendrá que recibir el efecto.

Regresando a la lectura de la porción, esta es la famosa semana de los espías, de cuando Moisés manda un representante de cada tribu a que ingresen a la tierra de Israel y traigan reporte. El resultado lo sabemos, diez de ellos tuvieron la consecuencia de la muerte, dos de ellos mantuvieron la consciencia y pudieron ver las maravillas del lugar y su potencial.

Esta semana podemos poner atención a esos momentos en que precipitamos por ansiedad, donde queremos controlar los resultados para nuestra conveniencia en vez de desarrollar la columna central que no tergiversa ni obliga, pero si observa, no es indiferente pero está presente sin desesperarse y está lista a actuar si es necesario, solo hasta ahí, hasta lo necesario.

Identifica tu trabajo de la semana querida Comunidad. Prepárate a actuar con buena consciencia, desarrollar capacidad de respetar el proceso. :-)

¿Te gusta la idea?

Te abrazo en la distancia cercana de identificarnos afines  querido amig@ de este blog.

Prana Raquel Pascual


Imagen http://lacuevaboreal.blogspot.com/2014/06/saber-esperar-antonio-machado.html

Busca profundizar

En la Haftará de la porción Behaalotjá, en la lectura de Zejaryá (Zacarías), vemos que el profeta tuvo una visión del Sumo Sacerdote y decía que Satán —la fuerza global que intenta evitar que cualquier individuo se conecte con la Luz del Creador— estaba a su derecha. 

El lado derecho representa lo positivo, el trabajo espiritual, y el izquierdo representa lo negativo o el egoísmo. Y si bien la mayoría de nosotros sabe que Satán tiene mucho que ver con el egoísmo y las acciones negativas, a menudo olvidamos que Satán también se presenta cuando realizamos acciones positivas.

Rav Áshlag explica que si hubiese dicho que Satán estaba sentado a su izquierda, habría significado que él estaba intentado hacer que alguien se volviera egoísta o que realizara algo negativo. Pero eso no es lo que dice la profecía. Dice que Satán estaba a su derecha, en el trabajo espiritual. Entonces, ¿qué hace Satán en el trabajo espiritual? Rav Áshlag dice que Satán nos intenta convencer de que basta con la inspiración que nos dio un concepto que acabamos de aprender, pero que no necesitamos profundizar tanto.

Así pues, me gustaría concentrarme en lo que Rav Áshlag dice sobre el concepto de klipot, que literalmente significa “cáscaras”. Cuando una persona no tiene gran deseo de aprender profundamente, esa falta de deseo no viene de nosotros; esta fuerza, Satán, que está involucrada en el trabajo espiritual, nos dice que estudiemos, pero que no profundicemos tanto; nos dice que sólo obtengamos una parte porque es mucho para nosotros. No somos nosotros los que decimos que sí, una parte de sabiduría que aprendimos nos ayudó un poco, pero no queremos ir más allá porque no queremos cambiar demasiado… lo dice Satán. El Lado Negativo, las klipot, nos dicen que no ahondemos más.

Por eso, si no entendemos que el trabajo espiritual, específicamente el estudio de Kabbalah y la Luz del Zóhar, es el aspecto en el que se presenta Satán para intentar detenernos, entonces nunca avanzaremos. 

Si creemos que la espiritualidad o el camino de la Kabbalah puede ser un camino espiritual sólo positivo, estamos equivocados, Satán estará allí para intentar detenernos de distintas maneras. La manera específica en la que Rav Áshlag dice que Satán intenta detenernos es la klipá que dice: “Llega hasta aquí, no vayas más allá”. Esta es la razón por la que muchas personas se conforman con un entendimiento básico y superficial.

Por eso la importancia de siempre buscar empujarnos por más, y hacer acciones positivas que nos den fortaleza para confrontar a la pereza y el conformismo espiritual.

Michael Berg / El Centro de Kabbalah Internacional

Shabbat Shalom

Prana Raquel Pascual

Texto e Imagen
https://www.michaelberg.net/es/articles/crear-un-camino-hacia-una-sabidur%C3%ADa-m%C3%A1s-profunda