lunes, 10 de febrero de 2025

El cambio individual


En estos días, hablando de cosas sorprendentes, te cuento que en esta porción de la Torá o Biblia, pasa algo muy trascendental, y por tanto muy famoso para cualquiera que ha tenido algún acercamiento al texto: La entrega de los 10 Mandamientos.

¿No te parece increíble que habiendo este evento de impacto tan supremo (La entrega de las Leyes para la Vida), la porción se llame "Yitró"?

Lo que observo es que hay un mensaje importantísimo para cada uno de nosotros.

Habrás escuchado en boca de muchos la frase "La gente no cambia" ¡Por supuesto que la has escuchado una y otra vez! pero...¿Tú que crees?

Yo por supuesto, creo justo lo contrario: La gente si puede cambiar...claro, no todo mundo cambia ni para donde a otros les conviene, ni en el tiempo que otros esperan; es verdad que hay gente que pecará de necedad y procurará no moverse de lugar, ni de opiniones, ni de creencias, es verdad que hay gente que se siente mejor aferrándose a no cambiar, yo le llamo: El mal del necio

Yo por mi parte, confío mucho en que el ser humano tiene a su alcance, ser adaptable, ser flexible, ser espontáneo, permitirse movilidad -que no necesariamente es fragilidad o volubilidad por falta de firmeza-, es tan solo asimilar que este mundo es cambiante, que es por sí mismo un lugar de oportunidades continuas: cuando crees que se cierra una puerta, normalmente se abre al menos una ventana, si no es que muchas más sendas a seguir, y por tanto, las personas podemos responder con nuestra buena disposición a movernos.

Yitró era un ser que había sido negativo (por decirlo de alguna manera que no sea la palabra "malo"). Había respondido a su entorno con vivacidad y por tanto, se volvió "bueno en ser negativo"😁, por decirlo así.

Pero Yitró respondió a lo que el entorno siguió ofreciendo, y de pronto se dio cuenta que había otra manera de ser y simplemente, se transformó: Sin dramas, sin duelos o sensaciones de ¿Qué he estado haciendo hasta hoy? En realidad, lo que hizo, es usar las mismas habilidades que había desarrollado en la negatividad, poniéndolas al servicio de ser constructivo y punto y así, ¡¡Fue un gran maestro para Moisés!!

Así también se nos habla de otro individuo en esta porción: Gershón, el primer hijo de Moisés.

El nombre Gershón, significa "extranjero en tierra extraña". Explican los maestros kabbalistas que no solo él, sino también nosotros estamos en este mundo como extranjeros, es realmente en Mundos Superiores cuando nos sentiremos realmente en casa, sin embargo, nuestra vida aquí, siempre es un viaje.

Al poner el nombre Gershón a su hijo, Moisés nos enseñó que todos somos nómadas moviéndonos de un lugar al otro en un mundo físico que cambia y desaparece, y que el mundo real es espiritual, el que es verdaderamente eterno. 

Si entendemos esto, tendremos un mejor viaje en esta existencia temporal y física, porque sabremos que el mundo espiritual, es nuestro verdadero hogar.

El cambio de un individuo es importantísimo en esta Tierra, por eso Yitró y Gershón, tienen un lugar especial en el texto de esta porción, aunque especialmente este segundo, no tuvo una vida famosa, pero si tuvo impacto de otras maneras, como la mayor parte de nosotros, sin fama, pero con importancia intrínseca en nuestro contexto cercano. 😉

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt

Itálicas El Centro de Kabbalah Internacional

Imagen https://www.youtube.com/watch?v=Oi924WQ9-os

domingo, 9 de febrero de 2025

Oír con consciencia


Estamos comenzando una semana para mi fascinante que es Yitró.

Lo más relevante de todo sucede en la primera frase de la porción: Y Yitró escuchó.

El mundo es un lugar lleno de comunicación, lleno de mensajes, pero es quien está abierto a escuchar con consciencia, no solo oír con el oído físico, eso sucede por default.

Con escuchar, me refiero a ser una vasija capaz de recibir: filtrar, contrastar con evidencia, buscar pruebas, tratar de comprobar, poner el tela de juicio, aceptar que la otra persona puede estar diciendo algo que tenga algo verdadero, y también sesgos personales. Me refiero a no caer en la creencia del sabelotodo.

Para comunicarse hay mensajero, mensaje, receptor, canal de comunicación y un contexto o situación que juega.

Un trabajo importante de quien quiera ser espiritual, es no tener lo que se llama fe ciega, ni tampoco creer todo lo que escucha. Una persona espiritual realmente es un buscador, no alguien que impulsivamente brinca a conclusiones porque así le conviene.

Yitró no solo escuchó con sus oídos. Seguramente en aquel tiempo se podía decir muchas cosas sobre los milagros que había hecho Di.os por los israelitas, pero nada de eso conmovió tanto a Yitró como para pararse y tomar acción, lo único que si le pareció contundente, fue cuando los israelitas actuaron en contra de sus dudas y sus miedos e hicieron una acción clara para demostrar su certeza.

Yitró era padre de Tzipora, esposa de Moisés, un hombre que ya había visto de todo en este mundo, ya había sido de los magos del Faraón, ya había sido líder de gente, ya no se cocía al primer hervor como se dice, y cuando fue a buscar a Moisés, fue determinante en enseñarle a ser el pastor que necesitaba el pueblo de Israel en su proceso.

Hoy tuve una prueba contundente de la importancia de saber escuchar sin necedad: Ayer alguien me dijo sin agenda alguna (ni para su bien ni para su mal), que tuviera cuidado con un cierto tipo de estafa; de primera instancia pensé, "no, no creo"...pero como no soy una persona de solo creer sino de saber, me metí a internet a averiguar y me tope con la evidencia, de que cierta persona que me estaba buscando para un tema, es efectivamente un estafador. Si no hubiera estado abierta a escuchar, no necear y buscar evidencia, creo que me hubiera metido en serios problemas.

¡¡Los ángeles te cuidan mejor si te dejas cuidar!!

¿Estás dispuest@a escuchar así de profundamente?

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt

Imagen https://www.linkedin.com/pulse/escucha-activa-y-conexi%C3%B3n-qu%C3%A9-son-c%C3%B3mo-redefinen-la-con-andragnes?originalSubdomain=es