6 de febrero de 2016
Cada desafío es en realidad un peldaño para pasar a nuestro siguiente nivel.
Karen Berg
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Este Shabbat, Mishpatim, es una oportunidad de no volver atrás, de no "hacer lo correcto y después arrepentirte y querer regresar"...¿Te ha pasado?
Seguramente nos ha pasado a todos que ya que estamos en la vía correcta queremos dar reversa porque el ego siempre nos vuelve a jalar. Como cuando obsequias algo que te gusta mucho y a la hora que los sueltas sientes un pequeño remordimiento de ..."porqué lo dejé ir...para qué se lo regalé si me encantaba..."
O pasa con las relaciones, a veces tienes una relación dañina y solo piensas en el momento en que termine y ya puedas volver a sentir tu libertad...y apenas estás fuera empieza una sensación de frío interno de "¿Pero qué hice?" Y en ese momento te entra el pánico y querer regresar a la situación que en ese momento deja de parecer caótica y que la mente te juega "chueco" y dices..."pero si era mi todooooo". o.O
La porción de Mishpatim contiene las leyes de la reencarnación. Los temas que venimos a corregir y de los cuales hemos sido esclavos. La idea es que no nos gane la gana de volver a ponernos el yugo...recordarán que a los israelitas apenas pusieron un pie fuera de Egipto, sintieron la urgente necesidad de regresar y como a nosotros en esos momentos de impulsividad, de pensar que todo tiempo pasado había sido mejor y que "para que nos alocamos" jajajaja...perdón pero si no te ha pasado, más bien no te has fijado :-)
A veces sucede que nuestra cabeza nos empieza a jugar rudo.
Un punto importante es que en esos momentos, no perdamos la Luz en remordimiento y en angustia. Hay que estar siempre conscientes de cual es nuestra corrección. Es curioso, a veces tenemos a gente muy opresiva en nuestras vidas y no cachamos que nuestro tikun es ser libres pero obvio nuestro pasado remoto nos hace pensar que nuestra corrección es "aguantar"...
Te lo volveré a decir y sabes que en este blog cuentas con muchos recursos en las páginas anteriores o con tu astrólogo de confianza: Tienes que entender cuál es tu tikún.
Tienes que saber cual es tu corrección para que estas decisiones, estos momentos de transición, estos ratos en que no sabes si "vienes o vas", te sean más transparentes y sepas realmente donde poner la mirada...¿Esto me sirve para mi corrección?
Recuerda que es sutil, alguien puede pensar que "conciliar cada una de sus decisiones es lo que debe hacer"...PERO OJO: si tienes tikún en Aries lo que tienes que hacer es "decidir tú". ¿Ves que opuesto y que sutil puede ser? Ninguna de las dos opciones es "mala" o "buena", solo que una si es tu corrección y al otra no...
Hay quien tiene que aprender a comunicarse y en vez de eso cree que ser estoico y no decir nada le vendrá mejor...Verás que el tikún no tiene que ser tan drástico como "robar o no robar", eso no debemos hacerlo ninguno, pero en cambio, son temas más sutiles que vamos a ver constantemente en nuestro proceso. Conozco una persona que su tema es no decidir lo que le es más cómodo, sino lo que sea más profundo y le involucre más, lo que toque internamente y lo transforme, no lo que se le presente facilito...Viene de Tauro va a Escorpio. Si fuera al revés, al revés sería. ;-)
Insisto, puede parecer sutil pero hace toda la diferencia.
Tienes que entender tu tikún, todo el trabajo espiritual es acerca de eso...por eso habitualmente en el camino no debemos de ir solos, porque lo que no vemos nosotros lo ven nuestros amigos o nuestro Maestro.
Revisa y medita en ello.
Shabbat Shalom
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
