Sábado, 12 de diciembre de 2015
Se ha dicho que lo más difícil que alguien pueda
conquistar, el ego que ata más fuertemente a una persona, la característica que
la aleja de los brazos del Creador, es la arrogancia. No es robar ni matar,
sino la arrogancia. ¿Sabes por qué? Porque una persona arrogante no necesita
nada y todo lo sabe. Confía en que siempre está en lo correcto y que las demás
personas están subordinadas a ella. No se doblega.
Si cometemos un error, pero no somos arrogantes, al menos
podemos admitir que hicimos algo mal. Podemos decir: “Está bien, intentaré no
hacer eso nuevamente”. Incluso una persona en la agonía de una adicción puede
estar potencialmente abierta al hecho de que necesita un cambio y podría decir
algo como: “Mañana intentaré no hacer esto o aquello. Mañana no consumiré”.
Por otro lado, una persona arrogante piensa que está bien el
lugar en donde está. No admite ninguna otra posibilidad, ninguna otra
situación. Por eso la arrogancia es una de las cosas que más nos cuesta superar.
Karen Berg
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Yosef tenía lo mejor de cada uno de sus hermanos y además
era el más querido de los hijos de Jacob su primogénito con Rachel.
Al menos a cómo suena en la historia, no era fácil tener a Yosef de hermano. Era literalmente el consentido y no había dudas al respecto, y no sólo lo sabían los hermanos, lo sabía el propio Yosef y no se dirigía precisamente con modestia hacia ellos, no en vano a ello, ellos comenzaron a aborrecerle y a hacer los planes para deshacerse de él.
Iban a matarlo, pero finalmente deciden venderlo como esclavo, y va toda la historia que conocemos.
Sabemos que Yosef llega a trabajar con el ministro, después la esposa del ministro se enamora de
el y quiere seducirlo el la rechaza y ella enojada lo acusa lo mandan al
calabozo por diez años.
Al final Yosef interpreta sueños, su conexión con la Luz le
daba ese potencial de interpretarlos. El copero y el panadero del rey que estaban ahí tuvieron
sueños y se los interpretó al panadero lo mataron al copero lo sacaron y lo
devolvieron a su posición.
Yosef le dice trata de salvarme cuando salgas pero pasan
después de dos años de que lo dijo, fue castigado por haber pedido ayuda.
Todo el proceso de Yosef era para hacerlo entender que todo lo que le acontecía, era para hacerlo crecer.
Así pues, cuando finalmente el llega a ser el Primer Ministro en el gobierno del Faraón, cuando vuelve a ver a sus hermanos que en la temporada de hambruna van a buscar ayuda a el reino de Egipto, ellos no los reconoce, pero Yosef a ellos sí.
Ahí ya vemos un ser muy diferente sin ningún rencor a los que en su momento le habían perjudicado. Logró crecer lo suficiente para entender la película completa y todo lo que pasar por ella le había transformado.
Observemos nos nosotros...después de todo lo que nos ha pasado ¿Estamos limpios de alma y corazón? ¿Nuestras emociones están suficientemente clareadas cómo para que ya no estemos demandado resarcir algo o reponer, o vengar?
¿Qué nos faltará más? ¿Dolor o Consciencia para abrir la coraza de nuestro ego?
Reflexiona lo Comunidad
¡¡Shabbat Shalom!!
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
