Si quieres meditar / escannear por los eventos de Japón te quiero compartir el link de la porción de Korach (Koraj), que es la que leemos para desastres naturales
https://www2.kabbalah.com/k/index.php/p=zohar/zohar&vol=41
MIÉRCOLES, 16 DE MARZO DE 2011
La duda puede ser buena cuando se trata de no seguir al rebaño. La realidad es más de lo que tus cinco sentidos perciben. Así que, sólo porque la gente diga que algo es de una forma, no quiere decir que lo sea.
El día de hoy, no seas una oveja del rebaño. Rehúsate a seguir las cosas por las apariencias.
Yehuda Berg
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Me gusta mucho leer historia de verdaderos kabbalistas que han estado en este mundo, trabajando para llevar la sabiduría de Kabbala hacia los humanos.
Uno de ellos con los que encuentro mayor afinidad se llama Baal Shem Tov, el Maestro del Buen Nombre.
El me parece que ha sido un gran ejemplo de alguien no seguidor, no oveja, pero si muy sabio.
Baal Shem Tov vivió en Europa Central en el tiempo en que los estudios de la Torah eran dominados por estudiantes de razonamiento complejo e intrincado. El en cambio, reavivó una relación altamente emocional e intuitiva con el Creador. Su historia personal se lee como si fuera extraída del Zohar, en la que humildes pordioseros y artesanos, de pronto se volvian sabios iluminados.
Durante la primera parte de su vida, , el Baal Shem era visto como un tonto ignorante de buen corazón, bien intencionado pero que sólo realizaba labores de poca categoría en la sinagoga de su pueblo natal en el sur de Polonia.
Un día para sorpresa de todos, un alto --renombrado y respetado-- rabbí de pronto anunció su intención de querer volverse discípulo de esta persona dedicada a hacer trabajos manuales en la sinagoga.
No es necesario decir que esto causó una gran conmoción. El Baal Shem Tov pronto tuvo un gran grupo de estudiantes, así como de adversarios que sintieron que el vulgarizaba las enseñanzas sagradas.
Baal Shem Tov siempre presentó sus enseñanzas, a traves de historias y parábolas de sencilla elegancia. Al hacer esto, el volvía accesible para quien se quisiera acercar a escuchar y a aprender. Por supuesto esto le granjeó enemigos que quisieron incluso acabar consu vida, aunque afortunadamente, no lo lograron.
Una de las historias que me vienen a la mente es una ocasión en la que estaban estudiantes del Baal Sham Tov rezando para abrir las puertas del Cielo, diciendo sus oraciones perfectamente claras y bien pronunciadas, pero los cerrojos del portón seguían cerrados.
Desde atrás, escuchando atentamente, un pequeño niño de pocos recursos que no sabía ni rezar ni leer, se sintió tan conmovido de la belleza de querer conectar con el Creador, que hizo lo que el sabía hacer. No sabía pronunicar las palabras de la luz, pero el contaba con un silbatito el cual empezó a tocar con gran certeza y convicción.
Por supuesto los ruidos que de ello se desprendieron fueron tales, que desconcentró a todos los estudiosos , que dejaron de rezar para ir a retarle y a decirle muy molestos, que guardara silencio para que les permitiera seguir.
En este momento, Baal Shaem Tov que era quien estaba dirigiendo el rezo, les pidió que dejarán al niño que siguiera tocando, ya que con la pureza de su deseo, las puertas del Cielo habían sido abiertas. =)
Todas las historias del Baal Shem Tov que he escuchado, son así, sencillas, conmovedoras y nunca están alineadas a la dureza de lo que nosotros podríamos pensar que es lo adecuado.
Las reglas cedían ante la pureza del deseo, sin mayor convención o cálculo. Sin ceñirse a la dureza del deber ser perfecto.
=)
Baal Sham Tov es entrañable para mi, por eso cuando fuimos a Israel y nos detuvimos en el bosque llamado como él, me incliné a recoger una piedra que casara perfectamente con mi mano derecha y la guardo hasta la fecha, con mucho cariño en una de las macetas de mi habitación, en señal de memoria, reconocimiento y cariño al Maestro del Buen Nombre y su hermosa manera de enseñar.
=)
Espero que tengas un día muy feliz.
Prana Pascual
Bibliografía: The Way. Michael Berg. Kabbalah Centre International.
(la foto me gustó, aunque no es silbato, es mimby, una flauta guaraní. =) )