La disciplina sana no daña la auto estima sino que busca dignificar a la persona. Ese es el día catorce del Omer, Maljut de Guevurah, la nobleza en la disciplina.
La disciplina debe construir individuos y maduros, adultos en capacidad de comenzar a dar al mundo, no tan solo a recibir.
¿Eres un disciplinador que cultiva auto-estima o que denigra con soberbia?
Shabbat Shalom
Prana Raquel Pascual
Basado eb Chabad.org
Imagen encontrada en http://www.sanaciondelaltisimo.com/la-educacion.html