Domingo 26 de julio de 2015
Nuestro trabajo no es arreglar a la gente. Nuestro trabajo es simplemente estar allí para ellos.
Karen Berg
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Siempre que son días como hoy, días de ayuno y restricción tan precisa, me doy cuenta cuanto tiempo de mi día se lo dedico a cosas como comer, asearme, acicalarme. Cosas importantes dedicadas en gran medida al cuerpo, pero no solo, sino que también cumplen una función haca mi vanidad, hacia mi ser social en el mundo, hacia generar una imagen y una impresión etc. etc. etc.
Nada de eso está mal, salvo que eso se vuelva lo más imprescindible de tu vida...y estos son buenos momentos para ver no sólo cuanto tiempo sino cuánta energía le imprimes.
Hoy estamos en este intento de sentir el dolor del mundo, a veces no nos costará gran trabajo pensar que para ese dolor no hay nada como lo que "terriblemente" nos pasa a nosotros, pero si tienes la fortuna de estar como yo en este momento, con una sensación de cajones razonablemente bien arreglados en muchos sentidos, puedes pensar que este ejercicio no te estará siendo significativo...Ojo, no lo pienses ni por un instante.
La verdad, estos son muy buenos momentos para darnos cuenta de nuestros enlaces. Si, quizás hoy nosotros tenemos paz mental, pero sabemos que esta no es la condición de tantos otros, puedo pensar la gente que enfrenta violencia cotidianamente, pensar la gente que está teniendo injusticias, quienes sienten soledad y desolación, quienes han perdido la fe en sí mismos, quienes no tienen comida ni techo.
Podemos ver las noticias y podemos observar a nuestro alrededor. Sigo con la convicción que tengo desde hace años que nosotros, cada uno debemos ser personas que irradien positividad en cualquier lugar en que estemos. Si te dedicas a ser simplemente neutro mmm, está bien, más o menos ayudas, pero la verdad es que no venimos al mundo a ser inertes e inocuos, no podemos siempre ser simplemente de valencia cero...parte del regalo de la fisicalidad es que no tengas ninguna otra opción que involucrarte, así que como nos enseñan nuestros Maestros, mientras haya sufrimiento en este mundo nadie puede pensar que ya es hora de descansar, el trabajo sigue siendo de todos.
Creo que los humanos aunque tenemos capacidad de pensar en grande y en amplio, no es cuando más nos invita a participar o a poner de verdad el Alma. Piensa en las causas que te son cercanas, los dolores que te sean familiares. Ve haciendo un círculo expansivo de la dimensión que logres aún ser sensible...
Medita por lo que aún te toque...lo que si te llegue a conmover no de llanto de película sino de verdad...lo que hayas visto de pena en este mundo con tus propios ojos no estuvo ahí por casualidad sino porque tenía que presenciarlo ya hacer algo al respecto, ojalá no solo meditar, pero hoy, este día si, recordar, visualizar, tratar de regresar a la vivencia...si además de todo se te despierta un ánimo de de verdad hacer algo concreto, espero que tengas la vasija de mantener esta sensación más allá de este solo día y te vuelvas un participante activo de las causas del bien.
Hagamos el trabajo con consciencia. Sin tener el dato clarísimo, el ayuno debe terminar alrededor de las 9:10 pm...ya cuando llegues ahí verás que los minutos pueden hacerse un poco más largos de lo normal, pero que tu también estás más fuerte de lo normal
Un abrazo Comunidad
Prana Raquel Pascual