lunes, 18 de noviembre de 2019

Señales verdaderas


Esta porción como todas las del Génesis tiene muchos pasajes distintos y cada uno con diferentes enseñanzas.

La porción de llama Chayei Sarah (Jayei Sarah, la Vida de Sarah) y ciertamente toma su nombre de que en este momento ella deja su cuerpo físico, ya entra a un estado de vida  distinta que es la espiritual.

Hoy seguiremos otra historia de la porción que es cuando Abraham manda a su sirviente Eliezer a buscar esposa para Isaac.y de ahí hay muchas preguntas ¿Por qué mandar a alguien que no era él ni el propio Isaac para encontrar a la persona idónea?

¿Por qué al fiel sirviente? Porque el no tenía agenda de encontrar algo en particular y podría ver las señales.

Eliezer fue advertido desde antes que su hija no sería la esposa de Isaac, es decir, la que podría haber sido de su interés ya estaba fuera de la selección, así que partiendo de ahí, ya no era una opción que sesgara la búsqueda, y entonces quedaba libre de buscar realmente a la más adecuada.

Para todos nosotros hay una enseñanza, que frecuentemente violamos: Querer ver y querer oír lo que nos conviene no es opción.

Uno no puede diseñar las señales que queremos o que gustarían a nuestro ego, si las condicionas, seguramente errarás, esa no es la forma.

Las señales tienen que ser espontáneas y sin un interés de que haya una dirección en particular, por ello aunque te obsesiones con algo (o alguien), no tiene por qué ser el camino que te corresponde.

Esta semana mantente atento a las señales que no estén ligadas a tu conveniencia, no sesgues ni te enterques en algo en particular: Nadie quiere realmente tener algo que no le corresponde porque seguramente ni tendrá continuidad, ni la luz que estás requiriendo y solo te hará perder la ruta.

Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera

sábado, 16 de noviembre de 2019

Acerca de los consejos


En muchos sentidos, esta porción nos habla de que para poder ayudar a alguien, es necesario que esta persona quiera realmente la ayuda. Todos tenemos miles de consejos para repartir, pero eso no quiere decir que tenemos ni derecho de darlos, ni de exigir a nadie que sea como nosotros se los estamos recetando.

Uno solo pueda ayudar cuando la otra persona 1) quiere  escuchar (diciéndolo con términos kabbalistas, cuando hay vasija) y 2) cuando me preocupo realmente por la otra persona, estos son los dos requisitos indispensables antes de que pensemos que tenemos la solución que todos necesitan.

Si la persona no te pide ayuda, si no quiere escuchar, quiere decir que solo lo quieres decir por ti, por tu ganas de decirle algo que te llena a ti algo de tu ego, o desde una posición de "yo si sé" o de "Tu tienes que cambiar hacia ser como YO quiero que seas, o hacia donde a mi me conviene"

La manera genuina de querer a alguien, es quererlo tal cual es, aunque no sea como nosotros queremos, cualquier otra cosa es condicionar nuestro cariño o aceptación.

Por otra parte, ¿Cuántos de todos los consejos que damos durante el día los tenemos conquistados en nosotros mismos?

Los patriarcas que leemos en la Torah, se empujaban hacia su siguiente nivel de desarrollo personal y espiritual, quien no hace eso no puede aconsejar.

No podemos ayudar si nosotros no hemos conquistado ese mismo aspecto, si no hemos atravesado lo que la persona ha estado atravesando, solo así podemos tener la misericordia necesaria para entender empáticamente, por qué trance está pasando esa persona, si no lo sabemos podemos mantenernos acompañándolos pero con un respetuoso silencio.

Lecciones por aprender, cuanto antes mejor.

Shabbat Shalom Querida Comunidad

Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera
Basado en clases de El Centro de Kabbalah Internacional
Imagen https://www.vitalcoachingbarcelona.com/como-desarrollar-la-empatia-2/