domingo, 14 de octubre de 2018

Sin prisa pero sin pausa


La porción de esta semana es Lej Lejá, la muy conocida entre los estudiantes de Kabbalah como la de las almas gemelas. pero en realidad ese tema es apenas lo menos importante del proceso, ya que si no se hace el trabajo previo, no se llega al resultado; llegar a resultados sin el trabajo necesario, generalmente, nos lleva a conseguir situaciones a las que más nos valdría no haber llegado.

¿A que me refiero?

A que más vale llegar a una relación o a un puesto o a un cierto tipo de logro, hasta que estamos listos para ello.

Sin haber preparado "la vasija" con antelación, significará probablemente, conseguir algo que después viviremos como un fracaso, una derrota, algo ya indeseable o incluso como una maldición.

En esta porción ya comenzamos a hablar de los Patriarcas, específicamente de Avram, quien fue el primero que entendió que el camino que debía seguir, era el de embarcarse en un cambio interno y no solo eso, sino elegir hacerlo libremente.

Y podríamos decir que Avram se dedicó a ello sin prisa pero sin pausa. No lo hizo IMPULSIVAMENTE.

Trabajando con mis pacientes y coachees es notable ver que cuando inician un proceso, lo que quieren es un alivio inmediato a alguna situación, mismo que no puede generalmente darse en una sola hora de trabajo. Iniciamos un camino en el que ellos deben ir reconociendo sus propios patrones, y por qué los han elegido hasta ahora. Ver que dichos patrones les cobran muy caro el "peaje". 

Generalmente cuando estamos fuera de ruta, nos llegamos a sentir perdidos, como si estuviéramos en un laberinto que nos regresa al mismo lugar de donde partimos pero ahora con más cansancio. Hay normalmente una sensación de que ya hiciste todo lo posible y ya pensaste todo lo probable. Generalmente esta es una creencia limitante y afortunadamente, falsa.

El proceso de encaminarnos a la luz es de dedicación pero especialmente de reconocimiento voluntario, y eso toma algo de tiempo, pero es maravilloso ver como si se pueden ir dejando atrás situaciones que parecían imposibles de resolver, y cuando empiezas a ser libre, estás en un mejor lugar para tomar nuevas decisiones, mismas que pueden implicar nuevamente con quien queremos pasar nuestra vida, donde queremos trabajar y para quien, que metas y que sueños queremos cumplir.

Esta es la porción en que se elige realmente hacer el trabajo espiritual voluntariamente, y eso abre un mundo nuevo de posibilidades para el que lo hace.

Liberar tu alma de yugos te permite elegir de nuevo y mejor.

Esa es la promesa de esta porción. Si decidimos salir de la tierra de nuestro ego y explorar las nuevas tierras de la libertad del alma el mundo es realmente más grande y mejor.

¿Te atreves a salir de tu viejo sistema de creencias? 

Sin prisa pero sin pausa, hay un mundo nuevo para cada uno de nosotros si no perdemos nuestra capacidad viajera.

Feliz domingo querida Comunidad

Prana Raquel Pascual

Imagen: https://www.joya.life/blog/grandes-viajeros-la-historia/

sábado, 13 de octubre de 2018

Extinguir la raíz de la confusión


Hay algo que tenemos que comprender bien y claro mientras estamos en este planeta:

Mientras que estamos en un cuerpo físico tenemos la gran oportunidad de hacer acciones positivas y de compartir, una vez que lo dejamos esa es la peculiaridad, ya no podemos compartir como tal, por eso muchas veces oramos por las personas que ya se desprendieron de este plano, para ayudarlos a seguirse elevando y a hacer lo que no les es factible.

Sin embargo, tenemos que recordar algo muy cierto también, mientras estamos encarnados también estamos aún sujetos a caer y a desconectarnos, a hacer cosas que pensaríamos que están superadas. 

Nuestra corrección suele tener constancia a lo largo del tiempo en diferentes formas y manifestaciones pero generalmente lo que se viene a corregir como tikún, no dejará de aparecer mientras seamos seres de carne y hueso.

¿Qué factores pueden afectarnos? 

- La distracción, no darte cuenta que ese es siempre un reto detrás del matorral
- El envanecimiento de pensar "ya lo vencí,
- El olvido
- La confusión (permitirle que surja que crezca y que se vuelva fuerte), La pereza de levantarse cada día a ser un miembro activo de esta vida
- La baja auto estima que te dicta que tu no puedes hacer algo que es necesario hacer, 
- La desidia de pensar "alguien más lo debería hacer" etc.

Esta semana estuve de viaje de trabajo y sin acceso a la computadora para escribir, pero eso me dio la oportunidad de ver y conversar con mucha otra gente nueva, o que hacía mucho que no veía. Una de las conversaciones fue justo al respecto de la confusión.

Cuando una situación emerge con un poco de ese sabor de ¿Qué haré? "No sé...será melón será sandía...", generalmente tenemos la respuesta correcta en nuestra cabeza y sin embargo, nos encanta hacerle al loco y decir es que de verdad no sé...

Eso es una raíz de negatividad que tienes que sacar de origen. La confusión se debe extinguir desde que surge, cuando es pequeña y no ha adquirido fuerza para de verdad envolvernos.

¿Tienes una raíz de confusión? No la dejes crecer ni un milímetro, aclárate, aclararlo, detén la situación de inmediato y llévala hacia la claridad.

Shabbat Shalom Comunidad

Prana Raquel Pascual