martes, 1 de mayo de 2018

Día treinta y uno del Omer

Tercer día de la quinta semana, Tiferet de Hod, hoy son treinta y un días del Omer, Compasión en Humildad. o Balance en Humildad

Les compartiré un texto de Omer: A Counting 

¡Sobrecogidos estamos ante la creación de Dios y el poder de la vida! Y todavía, a veces nos sentimos vulnerables y expuestos, y el signo de exclamación se convierte un signo de interrogación. Cuando nos sentimos pequeños, nos preguntamos cómo encaja todo.

La vida puede ser tan grande, tan abrumadora, y que somos muy
pequeña. El temor se convierte en miedo.

Sal a la naturaleza levántate de tu escritorio, de tu sillón,
y aventurate en el bosque, en las orillas del lago, en el campo,
en cualquier camino. Párate entre las sombras; voltea tu cara hacia
la luz. Es reconfortante no estar en el centro del Universo. 

Cuando el mundo gira en torno a nosotros, el peso y la presión son demasiado grandes. El miedo nos obliga a mantenernos firmes para mantener el control. Pero estar en el centro es estar en un lugar solitario, y en verdad, es ilusión, porque nunca estamos en el centro.

Anhelo ser una partícula en una lluvia de luz. Oro para que yo sea una pequeña parte en un esquema más grandioso. De pie en la majestad de la naturaleza proclamo: ¡Qué magnífica es la vida! ¡Qué misteriosa! Y he aquí, sobre el suave suelo, pasos de danza solar, y digo "amén".

Libro de Rabbi Karyn D. Kedar

Estamos en la semana de la Humildad. A veces pensamos que todo gira a nuestra alrededor, pero podemos cambiar un poco el foco, la perspectiva, ver que hay tanto y tantos alrededor y re-dimensionamos. Podemos descansar: No todo el mundo debe ser cargado en nuestros hombros.

Balancea humildemente lo que es tuyo y contempla con maravilla, lo que no.

Prana Raquel Pascual
Imagen encontrada en Pinterest https://i.pinimg.com/originals/78/c4/4a/78c44a0638dcb2db2f9f3c1ec85f2027.jpg

lunes, 30 de abril de 2018

Día treinta del Omer

Hoy es el segundo día de la quinta semana, día treinta del Omer, Guevurah de Hod, Disciplina en la Humildad.

Hay algo que es importante considerar en la conducta humana; ninguna conducta idéntica sirve para todo, en todos los momentos, incluso las que consideramos más positivas. Incluso compartir tiene sus matices ¿Lo has notado? A veces compartir es "no dar", y con eso ayudas más que no haciéndolo.

La humildad tiene también esa necesidad de ser aspectada. 

Con la disciplina, la humildad logra tener dimensión. Alguien que incluso frente a otro que le quiere lastimar, no se atreve a protegerse, no siempre es el ideal, ni el "bueno", ni lo aconsejable. 

Nosotros como estudiantes de Kabbalah somos más trabajadores del balance que de la inocuidad o la indefensión, y mucho menos de la agresividad. OJO. Muchas confusiones suceden en este punto de inflexión de nuestra conducta.

Tenemos que saber que no por humildes, siempre deberemos ser los que se queden callados, especialmente ante un acto malvado, erróneo, peligroso.

La severidad, la disciplina en la humildad, sabrá cuando se tiene que poner un límite ante una situación que no puedes dejar pasar sin volverte cómplice de una injusticia...eso no quiere decir que te vuelvas soberbio o el amo de todas las verdades, simplemente que como par en este mundo, tampoco te "hundes en tu sillón" ante algo que debe ser corregido.

Entiendo que la severidad o la rigurosidad, la asociamos con ira, con una emocionalidad en la que es muy fácil crecerse por encima de otro. Cuidado.

La disciplina en la humildad no es sentirse superior, es simplemente poner orden donde se requiere, cuando se requiere, como un par responsable y sin altanería.

Responsable, esa palabra me hace resonancia cuando somos humildes, pero no pusilánimes (que muestra poco ánimo y falta de valor para emprender acciones, enfrentarse a peligros o dificultades o soportar desgracias).

Este ingrediente es importante para no ser débil y confundirlo con humilde.

A practicar con consciencia Comunidad.

Prana Raquel Pascual

Imagen https://deconceptos.com/general/pusilanime