martes, 7 de marzo de 2017

Encontrar el punto de origen

Hoy mientras buscaba material acerca de Tetzaveh, la porción de la semana, me encontré con una clase de otro tema que dio Shimon Sarfati en la que hablaba de esto:

"La única manera de cambiar en nuestra vida es ir al nivel de semilla.
 
Nuestros sentidos siempre quieren lidiar con el efecto.


Tenemos que saber que no hay "Instant Kabbalah" (Kabbalah Instantánea), hay in proceso para que las cosas cambien.


En este mundo existe la luz y la oscuridad y nuestra misión es iluminar, activar la luz que hay detrás de la oscuridad, iluminar la oscuridad.


Me quedé pensando lo útil de este consejo, no hay cosa que nos desoriente más que pensar que existe el de repente.

Cuando no eres consciente de que tus problemas y dramas personales están sembrados por ti en alguna parte previa de tu proceso, es muy difícil corregirlos en el efecto, es decir, si no viste que tu relación tenía problemas, es muy difícil lidiar con la demanda de divorcio que llegó así "de repente".

¿Cómo puedes corregir algo cuando no sabes ni qué es lo que se tiene que corregir? Es como pararnos al frente del motor descompuesto de nuestro auto y soplarle a ver si por arte de magia se compone y enciende.

Muy seguramente vas a querer solucionar con las mismas herramientas con las que llegaste hasta ahí, pero eso no es posible. tienes que entender que lo que te sucede es resultado de un proceso de tiempo atrás, meses, quizás años y si no detectas que es lo que genera el caos, no lo podrás solucionar.

¿Andas en algo así últimamente?

Quizás necesites ayuda, pero no un consejito, ayuda de alguien que te tenga paciencia y tu confianza, sin consejos sino con preguntas inteligentes, vaya desentrañando el rastro que va quedando cubierto del punto en que se empezó a originar.

Tienes que dedicarle tiempo y energía comunidad. Los milagros existen pero de verdad que no suceden si algo no se soluciona desde la raíz en la consciencia.

Prana Raquel Pascual

Basado en texto de Tevet Shimon Sarfati 2009 Centro de Kabbalah Internacional

Imagen encontrada en http://www.fotolog.com/josyta_07/28228882/

lunes, 6 de marzo de 2017

Recibir y Mantener.

Hay dos cosas importantes que vamos a estar estudiando esta semana: la importancia de tener una vasija que pueda recibir y además que esta pueda mantener lo que recibe.

Las condiciones para ello es primero tener certeza (para recibir) y después, tener apreciación (para mantener).

La oportunidad de esta semana es tener certeza pero a su vez tener apreciación para mantener lo que recibo, lograr tener ese conocimiento, ese entendimiento.

Cuando dejamos de apreciar o de tener certeza podemos empezar a perder las bendiciones en nuestra vida. HBsh.

El Rav Berg siempre decía --nos cuenta Ariel Grunwald- que muchas veces pedimos, meditamos, oramos, rezamos, y muchas veces lo hacemos por lo que no tenemos, pero el explicaba que debíamos de rezar por lo que ya tenemos.


La verdadera oración es por lo que ya tenemos: Si tengo pareja, quiero mantener mi pareja, si tengo salud, quiero mantener mi salud, y las cosas que no tengo van a venir solas, pero debo apreciar lo que ya tengo.

Muchas veces podemos tomar lo que tenemos por sentado, por ya ganado, pero esta es una buena fórmula para perder en vez de para tener más.

Por supuesto es válido desear, el alma es deseo, pero lo que yo observo es que recibir, y apreciar lo recibido, es la plataforma para poder tener aun más prosperidad con el significado que conversamos aquí hace unos días, esto que tiene que ver más con la cualidad que con la cantidad.

Algo que noto de manera empírica en mi vida y en la de mis amigos y clientes, es que muchas veces llega algo a nuestras vidas, no necesariamente lo definitivo, por ejemplo, una responsabilidad temporal, pero que nosotros podamos comportarnos como si fuera de oro, como si fuera lo más importante. Eso te prepara para algo que quizás no sabes, pueda ser la responsabilidad de tu vida.

Si te fijas, la sinceridad y el darse de corazón que aprendimos la pasada semana es lo que necesitamos para tener cómo recibir lo que de verdad sea para nosotros. Ser de oro por dentro y por fuera como el Creador pidió que fuera el tabernáculo (nosotros).

Las personas necesitamos ir adquiriendo eso, nuestra verdadera humanidad a partir de entrar en contacto con la vida y entregarnos a ella con pasión, no a medias tintas. Eso genera "vasija", y después apreciar, eso lo que sella nuestra vasija para poder recibir con permanencia.

¿En qué necesitas seguirte desarrollando para ser una vasija de Luz que pueda recibir y mantener?

Feliz día Comunidad

Prana Raquel Pascual
Basado en clase de consciencia de Tetsavé 2015 Centro de Kabbalah Internacional.
Imagen Pinterest