lunes, 30 de octubre de 2017

Dar propósito a nuestros deseos.

El deseo es nuestra moneda en la vida y el trabajo más importante es ¿Dónde lo invierto?

La semana pasada la lección fue:

“Ve hacia ti mismo, anda a buscar dentro de ti para convertirte en la persona en la que viniste a ser.”

Solo los niños chicos y la gente que ha perdido su mente hace algo sin propósito, sin embargo ¿Cual es ese propósito?

Poder revelar nuestra divinidad y compartirla con otra gente.

Nuestros Maestros nos explican en dos preceptos que parecen similares, el propósito de lo que tenemos por hacer:

- Amar a nuestro prójimo (amigo) como a nosotros mismos
 y / o la otra manera de comprenderlo
- No hagas a otros lo que es desagradable para ti.

Algo interesante en este punto es que al estar el deseo involucrado, se vuelve clave conducir esa energía del deseo a través de dichos preceptos, que son los que pueden conducirnos a un lugar, donde no solo seamos observadores pasivos de la vida y tampoco destructores de ella.

Si solo fuéramos observadores pasivos del Mundo, probablemente la especie humana ya estaría extinta. No somos ni los más rápidos, ni los más ágiles, ni los que tienen mejores sentidos de olfato, vista etc., pero somos la especie que puede transformar su entorno y --agraciadamente-- también su interior.

El deseo es lo que puede hacer que alguien se pare a sembrar un campo entero, quiera descubrir la cura para algo, planee unas vacaciones de experiencia para otros, cocine un platillo exquisito, construya una máquina que resuelva problemas ...claro que si ese deseo está dirigido bajo esos dos preceptos, puedes realmente aportar al Mundo y a tu prójimo. Si olvidas ese propósito, te puedes volver un destructor o alguien que pase por encima de los demás inmisericordemente.

El deseo no es lo que está mal en si mismo, pero es diferencial para la resultante, con qué propósito es que lo tiñes.

El deseo es el que puede manifestar una Creatividad en un mundo material en el que habitamos.

¿Cómo manifiestas tu la divinidad para ti y para otros en este Mundo mientras vives esta experiencia espiritual, al tiempo en que habitas en este cuerpo humano?

Esta pregunta es clave para el resto de tu vida, y también del porvenir de todos nosotros como Humanidad.

Prana Raquel Pascual

Basado en clase de Vayerá 2012 Centro de Kabbalah CDMX 
Imagen encontrada en http://www.ethozgroup.com/ways-older-generation-creative-millennials/


domingo, 29 de octubre de 2017

Dispuestos a dejar ir.

En esta porción (Vayerá), como en todas las del Génesis (Beresheet) pasan infinidad de eventos y muchísimas lecciones para nutrir nuestra consciencia.

Uno de los eventos muy conocidos por nosotros, es seguramente el episodio en que El Creador ordena a Abraham, sacrificar a su hijo a quien había tenido después de 100 años.

Agarra a tu único hijo al que amas tanto y llévatelo a la tierra de Moria y úsalo como sacrificio, como te voy a decir...

A la mañana, Abraham se levantó temprano (los Justos --tzadiks-- siempre que las cosas van contra su voluntad las hacen cuanto antes), tomó a un burro, a sus dos ayudantes, guardias etc., agarró a su hijo Isaac, madera etc. y se dirigió al lugar al que Di-os le había mostrado desde lejos.

Al llegar les dijo a los ayudantes "Siéntense aquí un rato con el burro, mi hijo y yo vamos a hacer lo que tenemos que hacer, y ahora venimos.

Agarró todo madera y lo necesario para un sacrificio. En la mitad del camino, Isaac le dice a su papá, “Padre ¿Que sucede?¿Donde está el animal para el sacrificio? A lo que Abraham le dijo "No te preocupes, Di.os nos va a traer al sacrificio". 

Abraham entonces agarró el cuchillo y cuando estaba a punto de llevar la acción de sacrificar a Isaac,  apareció un ángel en el cielo y le dijo "No lo mates, no le hagas nada ya vimos que tienes una verdadera conexión con el Creador y que nada te puede detener, ni siquiera el amor a tu hijo", y entonces vió que había un carnero y fue al que sacrificó.

Di.os vino y lo llamó una segunda vez, y dijo a Abraham: "Porque tuviste el valor de incluso dejar ir a tu único hijo, te voy a da una bendición tu y tu semilla se multiplicarán como las estrellas en el cielo la arena en la playa y a través de tu linaje, y el mundo será bendecido.

Justo la piedra en que sucedió este sacrificio es donde se construiría El Templo, el domo de la roca, que es el justo el Centro del Templo.

Los kabbalistas en la mañana, la primera cosa que hacen es leer esta historia ("la atadura de Isaac")

Una de las principales conexiones que nos da esta porción es construir la habilidad --y secreto de la felicidad y del deseo-- que es cada mañana dejar todo ir, dejar ir apegos, todos los días pasar por un momento de dejar ir todo.


¿De que estaríamos nosotros dispuestos por estar en esa consciencia de certeza?

La Biblia es un código, no es una solicitud de una acción literal con un hijo o un carnero, sino con algo que en nuestras vidas verdaderamente nos esté atando, algo de lo que dependamos de tal manera que no podamos seguir adelante...¿Qué tendrías que dejar ir con toda certeza de que todo estará bien, aunque tu no sepas exactamente cómo?

Feliz domingo Comunidad

Prana Raquel Pascual

Basado en clase del Centro de Kabbalah Mx 
Imagen encontrada en http://cenitpsicologos.com/cuando-perseverar-y-cuando-saber-dejar-ir/