viernes, 12 de julio de 2019

Como pez en el agua



En esta porción y la pasada hemos estado hablando de #vulnerabilidad, de que no estamos exentos de ser afectados por la negatividad, y hay que saberlo para estar atentos.

Esta porción está largamente relacionada con los que llamamos El mal de ojo, ayin hará עין הרע

¿Pero de que hablamos cuando mencionamos "El mal de ojo"?

Significa que cuando alguien cree que le falta algo ... y mira a alguien más, que tiene ese "algo" de lo que cree carecer, eso puede provocar que se accione su naturaleza reactiva --especialmente cuando no se está en el estado mental correcto--, cuando se está viendo solo para sí mismo. - y ese deseo reactivo es tan intenso que chupa la energía de esa otra persona, especialmente mientras lo mira. Eso es básicamente el mal de ojo.

Cuando puedes ver claramente que una persona es malvada y no te desea lo mejor, por supuesto que no debes estar cerca de ella, hay que protegerse activamente.

¿Pero qué pasa con todas esas personas que ocultan lo que les pasa por la cabeza y no tienes ni idea de lo que está sucediendo... ¿Cómo te proteges?

Ahora, el Zohar realmente nos está dando una idea de cómo podemos protegernos del mal de ojo porque nunca podemos detectar a todas las personas que podrían tener intenciones negativas a nuestro alrededor, así como en esta porción #balak, los israelitas estaban viviendo sus vidas inadvertidamente de las negras intenciones de Balak y del hechicero a quien convocó, Bilaam quienes los veían desde lejos urdiendo sus negativos planes.

El Zohar tiene un verso extenso en esta porción. En este verso, el niño llamado "el yanukah" está hablando con los sabios y diciéndoles: “Estoy protegido del mal de ojo porque soy de la familia de los peces, y el pez está protegido del mal de ojo. No puede ser herido o afectado por el mal de ojo ".

Hablamos antes sobre el mal de ojo que tiene que ver con la percepción de un vacío por parte de un individuo que luego succiona energía de otra persona, lo que causa el mal de ojo.

El pez es uno de los únicos animales que no parpadea. Nosotros humanos tenemos que hacerlo para humedecer nuevamente nuestros ojos, pero ellos están completamente rodeados de agua, no lo necesitan.

El "no parpadear" representa un nivel de protección que podemos manejar. El secreto del pez es que estamos hablando de una criatura que está rodeada de agua y por tanto puede no parpadear.

El agua es en realidad el secreto de la protección del mal de ojo. ¿Qué es el agua? ¿Cuál es la naturaleza del agua?

Sabemos kabbalísticamente que cualquier entidad física en este mundo es manifestación del 1% de una fuerza metafísica, que no existe en la realidad física. Ese elemento en este caso se llama el elemento de Chesed, que es la energía de dar, la energía de potenciar la fuerza de la columna derecha (compartir) y su representación en el mundo físico, es el agua.

Lo que el yenukah (el niño) nos enseña en este verso, es que cuando estás actuando como Chesed, como dador, con los atributos de ese reino estás realmente protegido y no te vuelves vulnerable por la negatividad del mal de ojo. 

Actuar con misericordia, con deseo genuino de compartir funciona de la misma manera como el agua que protege a los peces. 

Tengo la opción de rodearme de esa energía actuando como ella, pensando de esta manera ... y al hacerlo, creamos una protección.

Este es un mensaje que nos llega hoy, no lo echemos en saco roto.

Por la noche será Shabbat, 
Shabbat Shalom Comunidad

Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt & Coach

Basado en clase de Eitan Yardeni 2005