martes, 15 de julio de 2008

Pedazo de vida. Julio 15, 2008.

MARTES 15 DE JULIO DE 2008. Una ilusión en la vida que nos mete en grandes aprietos es la sensación de que no hay suficientes cosas buenas para todos.Es como ver como se van comiendo tu postre favorito frente a tus ojos y todo el mundo se sirve un grande y jugoso pedazo, y todavía no está ni cerca tu turno. Comienzas a pensar que no va alcanzar para ti, así que rápidamente empiezas a maquinar estrategias para asegurarte de que definitivamente recibas tu pedazo.


La mayoría de nuestros pensamientos diarios se centran en evitar que otros reciban los suyos.


Ahora imagina el alivio que sentirías si el mesero saliera de la cocina cargando dos bandejas más del postre, recién salidos del horno, y anuncie que hay bastantes más horneándose. Te darías cuenta entonces que había más que suficiente para todo el mundo, y también que no había necesidad de gastar toda esa energía en estresarte por tu pedazo, su tamaño, la calidad, el orden en que lo recibiste. Podías haberte relajado y simplemente haber pasado el tiempo agradablemente.


Sigue trabajando, moviéndote hacia delante, compartiendo y ocupándote de la gente que se cruce en tu camino. Te llegará tu pedazo a su debido tiempo. Mientras más duro trabajes por este, mejor sabor tendrá.


Yehuda Berg

____________________________________________

foto: bp0.blogger.com/.../s400/pastel+del+yao.jpg

____________________________________________

Ciertamente he conocido este episodio de los pasteles, especialmente cuando comías un "pingüino marinela" y alguien se acercaba peligrosamente a pedirte cuando ya sólo quedaba la cremita que era la que estabas reservando para "el gran final" ja ja
Pero hablando de ello, también he conocido e incluso estado en el lado de los que ni siquiera extienden su plato porque están seguros de que ellos no recibirán, quizás porque no merecen, quizás un poco por víctimas, quizás un poco por altanería.
Altanería si, lo lamento. A veces lo somos. Y la vida se nos ofrece, los recursos, los cariños, las oportunidades y nosotros no extendemos nuestra mano para recibir, quizás porque sentimos que no lo hicieron como yo quería o quiero hacer sentir mal a quien nos extiende la ayuda "porque no llegó antes" o cualquier otra razón que el ego nos pone en la cabeza.
Alguna vez escuché a mi maestro decir que hay que pedir cada mañana sintiéndose pobre, incluso los que crecimos como católicos muchas veces oimos que el reino de los cielos sería de los pobres y muchos lo interpretaron como literalmente pobres, como si la prosperidad fuera un pecado. No es así. No es a lo que se refiere.
"Pobre" en este caso se refiere a la sensación de que necesitamos de la Luz en nuestras vidas, que sólo a través de pedir con un corazón humilde ante la Luz podremos recibir...y no porque la Luz no quiera dar, sino hasta que nosotros le abramos la puerta ella entrará.
Ten hambre de la Luz. Humildemente quitate tu abrigo de "yo puedo solucionar todo solo" y pide ayuda. Todos la necesitamos.
Cariño,
Prana Pascual